domingo, agosto 07, 2011

el enfrentamiento del JMJ

El próximo 11 de Agosto comienzan la Jornada Mundial de Juventud (JMJ) en Madrid, con la polémica visita Papal, con este tema no puede más que hervirme la sangre, pensaréis que me parece fatal que se paguen 50 millones de euros en la visita de un líder religioso en concepto de seguridad e infraestructura, que en este país laico se de cobertura a un acontecimiento religioso de estas dimensiones, pero nada más lejos de la realidad.
Siempre he tenido mis ideas muy claras y no comulgo con la iglesia católica, en realidad no comulgo con ninguna religión en concreto, tengo una manera concreta de vivir mi vida y de afrontar el "más allá" que no tienen nada que ver con ninguna religión, pero dentro de la claridad de mis ideas siempre ha estado presente la huida de los fundamentalismos y tan malo me parece aquel que me desprecia porque no creo en lo mismo que él como aquel que me desprecia porque en muchas ocasiones he tenido que salir en defensa de la religión.
¿Cómo se me ocurre salir en defensa de la visita Papal si yo hace mucho tiempo que renegué de la iglesia Católica? Lo que a mi me cuesta trabajo concebir es como veo a gente coherente, críticas con el mundo que les rodea y con facilidad de argumentación, hablar sobre este tema como talibanes, unos como talibanes de Jesús y otros como Talibanes del ateísmo.
 Siendo lógicos la JMJ cuestan mucho dinero, pero atraen a más de un millón de personas con una fé concreta, que han cogido aviones con compañías españolas, que se alojan en nuestros hoteles, que compran en nuestros comercios y que vienen semanas antes de que empiece el acontecimiento, por lo que el dinero que nos cuesta que venga Benedicto queda más que amortizado, sin hablar de la publicidad que trae consigo un acontecimiento de tales dimensiones. Cuando millones de peregrinos visitan Santiago de Compostela cada año nadie se queja, probablemente porque somos todos conscientes de que a pesar del carácter religioso del camino no deja de ser un aliciente turístico, claro que también sabemos que no hay que ser un ferviente creyente para hacer el camino y disfrutar de la paz que conlleva. Entiendo que la iglesia católica ha cometido muchos errores y sigue cometiéndolos, que es una institución anacrónica que no pinta demasiado en una sociedad moderna, pero es el momento de dar razones argumentos válidos, empezando porque se pagan las visitas, incluyendo los operativos de seguridad, de todos los jefes de Estado y el Vaticano no deja de ser un Estado y Benedicto XVI no deja de ser el jefe de ese Estado, en el caso de que Isabel II de Inglaterra nos visitara tendría todos los gastos pagados y además vendría un líder religioso ya que ella es cabeza de la iglesia Anglicana (como todos los reyes ingleses desde Enrique VIII) la gran diferencia, reitero, es que Isabel II no va a mover a una masa ingente de fieles que gasten dinero en mis comercios, utilicen mis hoteles y mis líneas aéreas, ya ya sé que los jóvenes participantes en el evento están alojados, pero muchos vienen antes, otros se van después, hay que tener presente que es un acto que mueve mucha gente de fuera de nuestras fronteras.
Por otro lado, si el Estado es Laico tengo que respetar la constitución y dejar que cada cual profese su fe, dentro de unos límites, pero claro confío en que esta masa de peregrinos cristianos no van a hacer sacrificios humanos ni animales.
Quizá la protesta más lógica sería que se amparen también actos de otras religiones y que el dinero que se destina con la Renta a la iglesia se reparta para "instituciones religiosas" independientemente de su signo, pero ese es otro tema.

Si con esta entrada he ofendido a alguien quiero pedirle disculpas no es mi intención ofender a nadie ni que nadie me denuncie por dar mi opinión.

1 comentario:

Morgadelo dijo...

Qué bien escribes Estrellita.
Pues yo tengo el testimonio de Dios en mí mismo y te digo que este es verdadero. Y no tengo necesidad de mentirte y me conoces. Ah, y el Papa no tiene autoridad para perdonar pecados, sino Dios.

Pero qué bien escribes, qué moderación, qué exquisitez :D